jueves, 1 de octubre de 2009


-Eh, deja que te veamos.
Si, si deja verte de verdad, sonrie, comportate.
Le cae el pelo, casi tanto como a mí. Duerme bastante, sueña poco y aspira a lo mínimo. Sufre el síndrome de inferioridad emocional, algo grave, lo sé, pero ella es fuerte, de las mas fuertes que conozco. Aveces siento escalofríos, miedos repentinos, y no me sale, de verdad que no. Podría hacerte daño, resultarte doloroso, pero podría decirse, que si lo minimo sale a varios trotes, tengo que buscar un día, uno que no sea de esos. De esos dias de NADA que tanto me enervan.
Imaginate un dia, uno cualquiera, que buscando lo obvio, tope con un obstaculo, uno de tantos, un nuevo nada, y por ello, toda esta maravilla, finalice. Tu, amiga mia ¿sufrirías? y si sufrieras, ¿cuanto sufrirías?
No necesito contestación dado que es una pregunta, evidente y sobre todo, sencilla. No cambiaría por nada, cualquier tarde, si es a tu lado, ni siquiera, una discutiendo, por que ¿sabes? Estar contigo llega a resultar lo mejor del día ¿que día? cualquiera que no sea de esos.
¿Razones? no necesito, ¿porqués? apenas tengo ¿busquedas? para qué
Vividora, sique así, sigue creciendo, no desvaries, no te atrofies, parate en cualquier estación, pero controla tus pertenencias, no me dejes atrás nunca por favor. Repito. Eres

No hay comentarios:

Publicar un comentario