lunes, 23 de noviembre de 2009

¿Por dónde empezó ella?
Ah sí ya recuerdo, a grandes rasgos pero me parece que sí, empezó por el final, si si, no te asustes, el final, no necesariamente significa de verdad un final, no porque en la vida, cada final es un nuevo comienzo.
Un domingo de cualquier calendario. Tarde. Casi de noche, los columpios de aquel parque oscuro estaban hasta los topes de rocío, su estirado ombligo le dejo alcanzar unos rayos de felicidad al fondo a la izquierda.
Recordar y recapacitar la hacía realmente felíz, pero llevaba meses siendo desdichada, al fin se decidió a poner las fotos, las cartas, los calcetines, la pulsera, el reloj y un calendario encima de la mesa, y se guardo el miedo y los remordimientos en un bolsillo.
Tardó varias horas en echar las cuentas, si, las cuentas de los días, las horas, los minutos, los lloros, las vueltas de su ira, de su tristeza de su absorción, de su simple no entender, de todo lo escuro que se le había vuelto todo desde aquel maldito abril.
Y alguna de las neuronas de su cabeza recapacitó al fin.

No hay comentarios:

Publicar un comentario